Sólo un pequeño recordatorio para insistir en la necesidad de la convivencia en paz y en la obligación para el respeto con los demás. En estos días, la mayoría de escolares han celebrado o celebran "El día de la paz", con lo cual una sigue manteniendo viva la llama de la esperanza de que en un futuro, estos niños de hoy, sabrán deshechar de su vida todo gesto de violencia, de maltrato y de desprecio por el resto de humanos con los que compartirán este maltrecho planeta. Para ellos y para todos los que tenemos el deber de educarlos en la cordialidad, yo también pido la paz, de momento, con la palabra.
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